Las ronchitas y el mounstro ansiogilo: externalización en terapia narrativa

“Es un niño muy ansioso y nervioso, tengo problemas con él porque de lo ansioso que es le salen un montón de ronchitas que ya tratamos de quitarle con medicamento pero no funciona”.

“Es un niño muy ansioso y nervioso, tengo problemas con él porque de lo ansioso que es le salen un montón de ronchitas que ya tratamos de quitarle con medicamento pero no funciona”.


Esas fueron las palabras que escuché de la vos de Ana al preguntar cuál era el motivo de su visita a mi consultorio.
Daniel su hijo, un pequeño de 10 años había sido diagnosticado con piel atópica, situación por la cual su madre lo había sometido a un tratamiento médico sin ver resultados realmente alentadores.


Ana me describió que las ronchitas salían cada vez con mayor frecuencia y en diferentes partes del cuerpo de su hijo, agotando los recursos que el médico que le trataba podía proporcionarles, por lo que el médico les refirió conmigo.


Al inicio de la consulta Ana me compartió que había observado que el salpullido el cual era bastante incómodo para Dani, aparecía cuando él se ponía nervioso por algunas situaciones por ejemplo: Al realizar exámenes o al tener discusiones con ella.


La técnica de externalización del problema en Terapia Narrativa incita a los usuarios a personificar los problemas que se presentan en sus vidas (White y Epston 2002) … La intención de esta técnica es la de lograr que el problema se convierta en una entidad separada y ajena a la persona.

 

 


EL PROBLEMA ES DIFERENTE DE LA PERSONA


ATZIN: Hola Ana y Dani , bienvenidos, ¿qué los trae por aquí el día de hoy?


ANA: Mire, lo que pasa es que Dani es un niño muy ansioso y nervioso, tengo problemas con él porque de lo ansioso que es le salen un montón de ronchitas que ya traté de quitarle con medicamento pero no funciona, lleva dos meses con tratamiento de pomadas y medicamento pero el doctor nos dijo que el problema es psicológico.


ATZIN: Comprendo, ¿que dices tu Dani?, ¿qué piensas de lo que dice tu mamá?


DANI: Sí, me salen granitos y me dan comezón, mas cuando estoy nervioso y las pomadas ya no me ayudan mucho porque me siguen saliendo granitos.


ANA: Me he dado cuenta que cuando lo regaño o se molesta o tiene que hacer un examen o exponer le salen más granitos, como la semana pasada que tuvimos muchas discusiones porque Dani me desesperó, porque los granitos no se le quitaban.


Yo le decía que tenía que controlar su ansiedad, pero eso hizo que le salieran más granos, ya no sé qué hacer…


ATZIN: Estoy escuchando que esta ansiedad es muy grosera con ustedes porque les hace pasar malos ratos…


DANI: ¡Sii, es como un mounstro!


ATZIN: ¡Claro! Dime Dani, ¿cómo logra este mounstro arruinarles los días?


DANI: Pone de malas a mi mamá, hace que mi mamá me grite y se enoje, a veces hasta hace que me rasque de más y no me gusta.


ATZIN: Entiendo. Ana, ¿qué hace este mounstro con Dani?
ANA: Lo pone irritable y hace que no me obedezca, que conteste y se porte grosero con sus hermanas, hace que le salgan ronchas y a veces hace que nos digamos palabras hirientes, me dice que lo deje en paz y yo le digo que no lo soporto.


ATZIN: Es como si el muonstro les dijera que hacer, como si le dieran de comer cada que él logra que ustedes se griten y se hieran, lo alimentan y él se siente muy a gusto molestando a su familia.


ANA y DANI (riendo): ¡Si!


DANI: Pero nosotros no lo queremos.


ATZIN: ¿Cómo se llama el mounstro Dani?


DANI: Es el mounstro de la ansiedad, mi doctor me ha dicho que ya no me ponga ansioso.


ATZIN: Dani, tú eres un niño inteligente, que ha tenido que convivir con ese mounstro, ¿cómo se llama el mounstro de la ansiedad, ese mounstro de las ronchas?


DANI: Es el mounstro : ANSIOJILO (risas) y le gusta comerme…


ATZIN: ¡Perfecto!, ese es su nombre: ANSIOJILO.
Entonces tenemos que ver qué acciones lo ponen a dieta, para que ya no te coma.


Platíquenme de alguna ocasión en la que lograron dejar sin comida al mounstro ANSIOJILO, ¿cómo lo lograron?


ANA: Cuando le hablo bien y sin gritarle, cuando le ayudo con eso de las tareas de la escuela… tenemos que hacer que el mounstro ANSIOGILO ya no nos moleste.


A partir de este momento la intervención se centró en la obtención de acontecimientos extraordinarios los cuales tienen como finalidad, estimular a las personas a que desarrollen nuevos significados en relación con ellos. En el caso de Daniy Ana, pensar acerca de cómo vencer al mounstro ANSIOGILO.

 


CONCLUSIONES


La externalización del problema permite que las personas que acuden a nuestros consultorios experimenten control sobre el problema que les está generando incomodidad, les permite verse de formas diferentes cuando su identidad se encuentra separada de este anterior y desde luego les permite que se muestren activos en cuanto a su erradicación.
REFERENCIAS


White, M y Epston, D. (2002). Medios Narrativos para fines terapéuticos. España: Paidós

 

 

LAS RONCHITAS Y EL MOUNSTRO ANSIOGILO: Externalización en Terapia Narrativa.

“Es un niño muy ansioso y nervioso, tengo problemas con él porque de lo ansioso que es le salen un montón de ronchitas que ya tratamos de quitarle con medicamento pero no funciona”.
Esas fueron las palabras que escuché de la vos de Ana al preguntar cuál era el motivo de su visita a mi consultorio.
Daniel su hijo, un pequeño de 10 años había sido diagnosticado con piel atópica, situación por la cual su madre lo había sometido a un tratamiento médico sin ver resultados realmente alentadores.
Ana me describió que las ronchitas salían cada vez con mayor frecuencia y en diferentes partes del cuerpo de su hijo, agotando los recursos que el médico que le trataba podía proporcionarles, por lo que el médico les refirió conmigo.
Al inicio de la consulta Ana me compartió que había observado que el salpullido el cual era bastante incómodo para Dani, aparecía cuando él se ponía nervioso por algunas situaciones por ejemplo: Al realizar exámenes o al tener discusiones con ella.
La técnica de externalización del problema en Terapia Narrativa insita a los usuarios a personificar los problemas que se presentan en sus vidas (White y Epston 2002) … La intención de esta técnica es la de lograr que el problema se convierta en una entidad separada y agena a la persona.

EL PROBLEMA ES DIFERENTE DE LA PERSONA

ATZIN: Hola Ana y Dani , bienvenidos, ¿qué los trae por aquí el día de hoy?
ANA: Mire, lo que pasa es que Dani es un niño muy ansioso y nervioso, tengo problemas con él porque de lo ansioso que es le salen un montón de ronchitas que ya traté de quitarle con medicamento pero no funciona, lleva dos meses con tratamiento de pomadas y medicamento pero el doctor nos dijo que el problema es psicológico.
ATZIN: Comprendo, ¿que dices tu Dani?, ¿qué piensas de lo que dice tu mamá?
DANI: Sí, me salen granitos y me dan comezón, mas cuando estoy nervioso y las pomadas ya no me ayudan mucho porque me siguen saliendo granitos.
ANA: Me he dado cuenta que cuando lo regaño o se molesta o tiene que hacer un examen o exponer le salen más granitos, como la semana pasada que tuvimos muchas discusiones porque Dani me desesperó, porque los granitos no se le quitaban.
Yo le decía que tenía que controlar su ansiedad, pero eso hizo que le salieran más granos, ya no sé qué hacer…
ATZIN: Estoy escuchando que esta ansiedad es muy grosera con ustedes porque les hace pasar malos ratos…
DANI: ¡Sii, es como un mounstro!
ATZIN: ¡Claro! Dime Dani, ¿cómo logra este mounstro arruinarles los días?
DANI: Pone de malas a mi mamá, hace que mi mamá me grite y se enoje, a veces hasta hace que me rasque de más y no me gusta.
ATZIN: Entiendo. Ana, ¿qué hace este mounstro con Dani?
ANA: Lo pone irritable y hace que no me obedezca, que conteste y se porte grosero con sus hermanas, hace que le salgan ronchas y a veces hace que nos digamos palabras hirientes, me dice que lo deje en paz y yo le digo que no lo soporto.
ATZIN: Es como si el muonstro les dijera que hacer, como si le dieran de comer cada que él logra que ustedes se griten y se hieran, lo alimentan y él se siente muy a gusto molestando a su familia.
ANA y DANI (riendo): ¡Si!
DANI: Pero nosotros no lo queremos.
ATZIN: ¿Cómo se llama el mounstro Dani?
DANI: Es el mounstro de la ansiedad, mi doctor me ha dicho que ya no me ponga ansioso.
ATZIN: Dani, tú eres un niño inteligente, que ha tenido que convivir con ese mounstro, ¿cómo se llama el mounstro de la ansiedad, ese mounstro de las ronchas?
DANI: Es el mounstro : ANSIOJILO (risas) y le gusta comerme…
ATZIN: ¡Perfecto!, ese es su nombre: ANSIOJILO.
Entonces tenemos que ver qué acciones lo ponen a dieta, para que ya no te coma.
Platíquenme de alguna ocasión en la que lograron dejar sin comida al mounstro ANSIOJILO, ¿cómo lo lograron?
ANA: Cuando le hablo bien y sin gritarle, cuando le ayudo con eso de las tareas de la escuela… tenemos que hacer que el mounstro ANSIOGILO ya no nos moleste.

A partir de este momento la intervención se centró en la obtención de acontecimientos extraordinarios los cuales tienen como finalidad, estimular a las personas a que desarrollen nuevos significados en relación con ellos. En el caso de Daniy Ana, pensar acerca de cómo vencer al mounstro ANSIOGILO.


CONCLUSIONES
La externalización del problema permite que las personas que acuden a nuestros consultorios experimenten control sobre el problema que les está generando incomodidad, les permite verse de formas diferentes cuando su identidad se encuetra separada de este anterior y desde luego les permite que se muestren activos en cuanto a su erradicación.

REFERENCIAS
White, M y Epston, D. (

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